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Ritual ancestral, los orígenes de esta fiesta se pierde en el tiempo aunque se mantiene la historia ocurrida sobre el año 1250 cuando la península se encontraba ocupada por musulmanes. Al necesitar agua en la fortaleza que se encontraba sitiada y encontrándose enfermos la mayoría de ellos, un grupo de caballeros templarios salieron a lomo de sus caballos atravesando las tropas árabes jugándose la vida. Al no encontrar agua, cargaron en los caballos unos pellejos llenos de vino que llevaron a la fortaleza con los que dieron de beber a los enfermos de de forma milagrosa sanaron. De esta gesta viene el nombre de los caballos del vino.

Esta Fiesta de los Caballos del Vino fue declarad fiesta de Interés Turístico en 2004 y más tarde en 2011 fue declarada Bien de Interés Cultural, un paso más para conseguir que sea declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco. Caravaca de la Cruz es un municipio de la provincia de Murcia de gran relevancia para la Iglesia Católica ya que desde 1998 el Papa Juan Pablo II la catalogó como Ciudad Santa.

Es conocida también como "La Ciudad de la Cruz". El nombre con el que se conoce la Reliquia que esta ciudad conserva es "Vera Cruz" (Cruz verdadera) pues según se cuenta es un fragmento de la verdadera Cruz en la que Jesucristo fue crucificado. Se trata de una Cruz de las denominadas patriarcales compuesta de pie y dos travesaños paralelos desiguales que forman cuatro brazos y el allázgo de esta Cruz parece ser que ocurrió en la época cuando se estableció la frontera de Castilla y León con la Granada ocupada por musulmanes. Fueron los caballeros templarios los primeros en defender y custodiar en el castillo la Cruz de Caravaca.